Todos en algún momento de su vida han sentido miedo o pánico escénico; en los colegios son muy comunes las presentaciones de los niños, niñas y adolescentes en escenarios bailando, cantando o presentando algún talento. Muchas de estas experiencias suelen generar con el tiempo pánico o fobia al escenario; y no en vano quienes de pequeños pudieron presentarse ante un público sin ningún problema, en algún momento de su vida tuvieron que sentir el miedo y los nervios que aparecen antes de hablar, presentar y conversar sobre un tema frente a varias personas.
Según un artículo de la revista psicologíca “psychology today” todo el mundo comparte varios miedos y dentro de la lista de los 5 temores está el miedo a la humillación en público y, si lo pensamos bien, si, todos alguna vez lo hemos sentido.
¿Quién no ha tenido miedo alguna vez de pararse en frente de otras personas a exponer una situación o un tema? ¿Quién no ha sentido nervios antes de una presentación crucial para un aspecto de su vida?
No obstante, hay que aclarar que así como hay personas con una verdadera fobia, también hay personas a las que se les facilita exponerse en público, pero el resultado de una buena presentación siempre va a ser la preparación, no importa si eres tímido o extrovertido, la organización va a ser primordial a la hora de hablar en público.
Un claro ejemplo de cómo ser un buen conferencista y de hacer una presentación enriquecedora para el público, son las charlas TED. Esta organización comenzó como una pequeña micro charla en California que buscaba transmitir ideas relacionadas con los temas de Tecnología, Educación y Diseño. Sin embargo, es hasta la llegada de Chris Anderson que TED comienza a crecer en otras áreas del conocimiento y, de este modo ,se vuelve una gran organización sin ánimo de lucro estadounidense con un reconocimiento a nivel mundial.
El objetivo de las conferencias TED y las TEDX (que son eventos independientes a TED certificados por la misma en otros países) no son solo conferencias sobre temas diversos para un publico en especifico; son charlas dirigidas a todo el mundo porque lo que se busca es conectar, transmitir e impactar a los demás con ideas innovadoras y revolucionarias y, si ves con atención, todas son experiencia e historias personales.
Es por esto que diferentes personas han escrito libros donde desarrollan y explican lo que se llama el método TED. En el libro de Chis Anderson “Guia practicas para hablar en público”, Anderson no solo da puntos claves para tener en cuenta a la hora de preparar la charla sino que, también da consejos de lo que se debe y no hacer en el momento de presentar un tema específico a un público.
Si bien este libro es una herramienta para quienes van a presentar una charla Ted; también funciona como guía para quienes deben hablar en público en otras situaciones. Las herramientas de este método se pueden evidenciar en las charlas TED que se encuentran montadas en Youtube y en la página oficial de esta organización.
Antes de abordar los puntos sobre el método TED es importante resaltar que todas las historias importan, pues dentro de cada anécdota hay algo valioso que enseñar. Todas las charlas y conferencias importantes que han marcado y se han posicionado en la red son charlas que hablan de una historia personal, de un aprendizaje y un proceso. Hablar en público es solo una parte del reto, la otra parte tiene que ver con tu vulnerabilidad y la disposición que tienen las personas que se paran en una tarima a contar su historia y a mostrarse ante los demás tal y como son.
Hilo conductor
Ahora, volviendo al método TED es importante resaltar que para preparar una charla o cualquier tipo de conferencia hay que tener en cuenta los siguientes puntos; en primer lugar, hay que establecer un hilo conductor, el cual debe ser atractivo y simple de entender para el público ya que a partir de esto se llevara de la mano a las personas presentes por los diferentes puntos y temas que van a exponer en la charla.
El hilo conductor, es de suma importancia porque a partir de él es que se mueve toda la conversación. Se recomienda utilizar historias o vivencias propias que sean divertidas o que logre tocar la fibras del público; lo que nos lleva al punto dos, la empatía. Generar empatía con los demás no solo permite conectar con las personas, también permite captar su atención y hacer llegar la idea con mayor facilidad a la mente de quienes estén presenciando la charla o presentación.
Generar emociones
En cada presentación hay que intentar generar emociones que hagan a las personas soñar o poder ver un futuro posible para que de esta forma las personas se motiven a ser parte de algo y, esto nos lleva al siguiente punto y es, tener claro el mensaje que se va a transmitir. Tanto en el comienzo como en el final, hay que tener claro el mensaje con el que las personas se queden y se lleven a casa. Más que una charla TED es un espacio que llama a la acción.
Confianza en sí mismo
Por otro lado, un punto realmente importante es la confianza en sí mismo, en lo que se sabe y en lo que se siente, pues de lo contrario se va transmitir la información de forma errónea, va haber ruido, ¿y como se gana esta confianza? preparándose, creando el tema, repitiendo la información una y otra vez hasta que salga de manera fluida. Tener confianza y manejar el nerviosismo en el escenario es una parte fundamental para que las personas se conecten con el mensaje y la historia que se está contando. Las charlas TED representan un gran reto y es el reto del tiempo, lo cual muchas veces genera mayor tensión para quien va a hablar, pero es precisamente ahí donde la preparación y la organización de los temas y el tiempo juegan un papel crucial. Mi recomendación es la respiración, es la técnica más rápida y efectiva. Respiración cuadrada, respiración profunda con exhalación lenta. Son mis favoritas.
Conocer la audiencia
Como punto final es de suma relevancia entender al público al que se dirige la conferencia pues muchas veces las personas recaen en tecnicismos y un lenguaje que suele ser demasiado específico; esto suele ser un problema porque no todo el mundo maneja el mismo vocablo y puede ser contraproducente, por eso recuerda manejar un lenguaje sencillo, como dicen por ahí, como si estuvieras hablando con un niño.
Finalmente, hay que recordar que una conferencia debe tener información de valor, no debe dejar cabos sueltos, debe dejar un llamado a la acción, una pregunta en quién escucha y una inspiración para quien la ve.
Prohibida su reproducción parcial o total, así como su traducción a cualquier idioma sin autorización escrita de su autor y Karol Franco.
COPYRIGHT © 2021 KarolFranco.com